El asunto de las grabaciones de Corinna no deja de arrojar titulares. Aunque desde el punto de vista oficial no parece que se vayan a tomar medidas al respecto, la cuestión dinamita la imagen de la primera familia del país. Y más tras conocerse que la reina Letizia ha sido grabada hablando de temas muy comprometidos para la monarquía.
11El pulso del príncipe al rey
Tal como era de esperar, don Juan Carlos se opuso a la elección sentimental de su hijo. Le dijo que Letizia no era la indicada. Sin embargo, don Felipe estaba ya decidido y echó un pulso a la corona. Amenazó con renunciar a sus derechos sucesorios si no aceptan a su novia. Mientras el padre analizaba la situación, el hijo desapareció.
En Zarzuela no sabían dónde estaba el heredero. Mientras tanto, el protagonista disfrutaba de unos días de amor con Letizia en Nueva York. El rey creyó que su hijo cedería. Se dio cuenta de que no era así cuando dio la espantá en la fiesta del 12 de octubre. Ahí don Juan Carlos vio que Felipe no iba a dar el brazo a torcer y lo dio él.