En Casa Real no ganan para disgustos. Pensaban que nada peor que el ingreso de Iñaki Urdangarín podía pasar cuando apareció Corinna en escena hablando sobre don Juan Carlos. Un asunto feo, feo y que podría hacer que el rey emérito tuviera que rendir cuentas económicas. Mientras tanto, la reina Letizia está enfadadísima por el desafío de la infanta Cristina y sus hijos.
3El exilio dorado en Ginebra
Los reyes acordaron que Cristina e Iñaki no debían dejarse ver por España a menos que fuera absolutamente necesario, como ocurrió cuando se trataba de visitar a sus abogados o bien por motivos laborales, en el caso de la infanta. La pareja se exilió en Ginebra. Don Juan Carlos se encargó de que su amigo el Aga Khan auxiliara económicamente a su hija dándole trabajo en su fundación. Para entonces, nadie quería contratar al ex deportista por su implicación en el Caso Nóos.
A los ex duques de Palma y a sus hijos no les ha faltado de nada durante estos años. La educación de los niños corre a cargo de los reyes eméritos. Por su parte, Cristina recibe un buen sueldo trabajando para una institución bancaria y también para el todopoderoso Aga Khan. Nada que ver con lo que se ha explicado que la pareja sufría estrecheces y de ahí que hicieran la compra en un supermercado de los llamados baratos. Tampoco es cierto que Iñaki se encargara de la casa durante las ausencias de su esposa. Han tenido y tienen servicio para las tareas domésticas.