Charly lleva 28 años a la sombra de su mujer Lydia Lozano. Poco se le conoce y poco quiere la colaboradora que se le conozca. Aunque muchas veces resulte contradictorio por las numerosas ocasiones en las que le nombra en los platós de televisión. El matrimonio se ha ido unos días de vacaciones para desconectar y reponer fuerzas para la vuelta. Lydia es toda una estrella de la comunicación y no hay quien la pare. Esta semana pasada ha estado en Tenerife disfrutando de la compañía de su marido. Los dos siguen muy enamorados y su relación va viento en popa.
10Todo un amo de casa
«Charly es todo, con él me ha tocado la lotería», ha llegado a afirmar Lydia. El matrimonio es una pareja feliz y nos consta que se quieren con locura. Mientras Lydia se deja la piel y la voz -recordemos que ahora también canta- en los platós de televisión, Charly vigila al detalle que a su esposa no le falte ni gloria: la lleva en volandas y la trata como a una reina. Lydia y Charly salen, entran, cenan, viajan y conservan amigos de toda la vida a los que invitan con frecuencia a casa.
Una casa que posee un orden de tareas muy bien equilibrado. Como podemos observar en las imágenes, correa de chorizos en mano, Charly es quien se ocupa de pasear al perro, un precioso cachorro que aporta una alegría inmesa al hogar familiar. Además, el marido de Lydia, es el encargado de arreglar esas pequeñas cositas de la casa que, como el gran arquitecto que es, controla a la perfección.