Irene Rosales festejó el pasado viernes su veintisiete cumpleaños rodeada de los suyos. En esta ocasión, ha sido una celebración tranquila junto a Kiko Rivera y sus dos hijas, Ana y Carlota.
Se rompe con ello la tradición de reunirse en Cantora, en casa de su suegra Isabel Pantoja. Mientras Irene paseaba por las calles de Sevilla, la tonadillera disfrutó de una jornada de buen tiempo en Fuengirola. Su presencia no pasó desapercibida.
Isabel Pantoja: de Cantora a su ático de Fuengirola
Irene Rosales cumplió veintisiete primaveras el pasado viernes. Y aunque dicen que la primavera la sangre altera, en el caso de la mujer de Kiko Rivera está más tranquila que nunca. Tanto, que ha decidido pasar su vigésimo séptimo aniversario rodeada de sus hijas y de su marido.
Los años pasan y las responsabilidades a veces van por delante de las celebraciones. Tanto a Kiko como a Irene les gusta salir, pero este año han preferido quedarse en casa y disfrutar de la compañía de sus dos dos hijas, Ana y Carlota.
¿Por qué Irene no ha celebrado su cumpleaños en Cantora? Parece que han preferido la tranquilidad a la celebración multitudinaria en casa de su suegra. Uno de los motivos podría ser la recuperación de Kiko, ya que el médico le ha exigido reposo y tranquilidad. ¿La otra razón? que Isabel Pantoja no ha estado en su Cantora del alma este fin de semana y ha decidido ‘escaparse’ a su ático de Fuengirola
Muy cariñosa con sus seguidores de Fuengirola
Amagando una sonrisa y con sus típicas y reconocibles gafas de sol, así posaba Isabel Pantoja con sus seguidores que le pedían una foto para el recuerdo. Nos cuentan, en exclusiva, que ha sido muy cariñosa con toda la gente que le paraba por la calle y que quiso dedicarle unas palabras. Ha paseado por la plaza de Fuengirola. Ha disfrutado de la soledad pero también ha presumido de la compañía de dos amigas suyas. Estamos seguros que no ha faltado una visita a sus peluqueras y amigas de confianza: las hermanas Galán.
De compras en el Mercado de «La Galería»
Entre paseo y paseo toca reponer fuerzas. Isabel Pantoja eligió el Mercado de la Galería para hacer sus compras. Es una zona de pequeños bares donde se sirven raciones y tapas gourmet, y donde, además, se compra pescado y marisco. Este lugar se encuentra a pocos metros de su ático.
¿Qué compró Isabel? Ella hizo la cola, como todos los demás, y compró marisco del bueno, indispensable en las famosas y exitosas comidas que hace la tonadillera.
El vínculo de la Pantoja con Fuengirola es muy grande, ya que, además de tener allí su ático en una de las mejores zonas del municipio, tiene alquilado un local, donde ahora mismo tienen abierto un buffet chino.
Durante el fin de semana ha visitado el ático que tiene en propiedad en la calle Miguel de Cervantes. Lo que no sabemos al 100% es si habrá pasado la noche allí o habrá preferido irse a Cantora, donde siempre se siente acompañada.