Ayer la tarde de Sálvame empezaba con una «dura» noticia. Nada más y nada menos que el abandono de Alonso Caparrós del universo Sálvame. Una decisión que pilló a todo el mundo de sorpresa. Poca gente se imaginaba que el presentador que había vuelto a los platós de televisión relativamente hacía poco, dejaría la televisión para centrase en su ámbito más personal. Al parecer la decisión no fue tomada de un día para otro, el colaborador lleva unos meses meditando sobre el tema. Pero ya está todo decidido. Y así lo comunicó ayer en Sálvame, deja el programa.
5Las drogas
Tras salir de GHVIP, Alonso habló sobre su adicción a las drogas. Explicó que soñaba con montañas de cocaína. La adicción le producía espasmos nerviosos que no podía controlar. Un auténtico problema que cuando presentaba Furor solo pudieron paliar atándole las piernas al taburete.
En esa época de descontrol, Caparrós llegó a consumir droga “como para matar a siete caballos”. No tenía fin y tomaba hasta que su cuerpo decía basta. En alguna ocasión, vio la muerte de cerca, quizás solo fuera una alucinación producida por la ingesta de cocaína. Viendo que el asunto se le había ido de las manos, Alonso acudió a un centro privado para que le ayudaran.
Lo cierto es que el colaborador no guarda un buen recuerdo de sus ingresos, pues le practicaban un tratamiento que incluía electroshocks y eso le provocaba fuertes dolores, amén de ponerlo en un estado de seminconsciencia. Era como un autómata. Eso sí, Alonso ha expresado que está completamente recuperado y que aunque alguna vez siente la punzada del deseo, logra vencerla.