Letizia Ortiz se consideraba suficientemente preparada para reinar cuando se casó con don Felipe. Fue en esa época cuando se dio de bruces con la realidad. No lo encajó bien porque le disgusta sobremanera no estar a la altura de las circunstancias. Y más entonces, que muchos en la familia la hacían de menos.
1Letizia se pasó de lista
Letizia Ortiz cometió un gran fallo cuando se casó con don Felipe. Creía entonces que estaba suficientemente preparada para el cargo por su dominio de las cámaras. Sin embargo, pronto comprobó que nada tiene que ver la profesión de periodista con la de princesa. En realidad, formar parte de una familia real es complicado si no has nacido en el seno de una. Al respecto, doña Sofía relató hace años una anécdota que sirve para ilustrar este punto. Era pequeña y tenía que acompañar a sus padres a un acto. Le dolía muchísimo una muela y así se lo hizo saber a su madre, que le respondió que aguantara sin quejarse ni llorar hasta acabar el compromiso.
En cierta ocasión, don Juan Carlos le espetó a su nuera, “Letizia, ya sabemos que eres la más inteligente de la familia pero deja hablar a los demás”. La anécdota tuvo lugar durante una comida privada en la que doña Sofía y su hermano Constantino debatían sobre la guerra de Irak. Y allá que terció la entonces princesa para soltar una perorata que duró veinte largos minutos. Los allí presentes no daban crédito a semejante manera de monopolizar la conversación.