Isabel Preysler brilló con luz propia en la prensa del corazón tras su divorcio de Julio Iglesias. Poco a poco, la celebrity consiguió hacerse un hueco hasta convertirse en personaje por derecho propio. Todo en ella interesaba. Eso ocurrió en 1978. Desde entonces hasta ahora, mucho han cambiado las cosas. Te contamos cómo se ha producido el ocaso de la Preysler.
3El dolce far niente
Isabel tuvo programa propio de televisión pero el resultado no fue el esperado. Así las cosas, decidió no volver a repetir la experiencia. Su hábitat era el papel cuché y a él se limitó. Ha sido personaje de una sola cabecera y tiene una gran influencia sobre la misma. En este sentido, ha potenciado mucho a Tamara, su ojito derecho. Todo en ella le gusta. Se llevan tan bien que tras un tiempo viviendo de forma independiente, la joven volvió al hogar familiar que tantos titulares acaparó en sus orígenes.
No cabe duda de que Preysler ha sido uno de los personajes mejor pagados de la prensa del corazón. Ponerla en una portada era garantía de éxito. El público de las revistas del corazón la adoraba. Desprendía un glamour que enganchaba y tenía el magnetismo de las divas, a las que ves pero no puedes tocar. Siempre estaba perfecta.
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