No cabe duda de que el cambio físico de Alejandra Rubio es más que evidente. A pesar de que las últimas imágenes han despertado la polémica, ella insiste en que su delgadez es propia de su constitución. Asegura, además, que nada ha ocurrido en su anatomía que pueda despertar las dudas sobre una/unas posible/es operación/es estéticas. En Cotilleo.es hemos analizado minuciosamente el álbum de fotos de la joven y hemos llegado a una conclusión: Alejandra no se ha operado, pero un milagro ha conseguido que su cuerpo se haya transformado. ¡Vamos a rezar!
9El descanso del guerrero
Tras estar toda la mañana caminando de un lado a otro, la pareja decidió darse un respiro en un restaurante donde decidieron comer. Y no solo comida. Ya queda menos para que veas la pasión con la que estos dos jóvenes se tratan cuando creen que nadie les está mirando. No nos gusta, eso sí, que Alejandra tenga esa adicción al tabaco. Tardó poco o nada para encenderse un cigarrillo mientras su novio le explicaba alguna cuestión muy interesante. Quizás estaban hablando sobre las vacaciones de verano.
Y lo que también parece haber copiado de su progenitora es el gusto por las gafas de sol, cuanto más grandes mejor. Así, a pesar de que su padre tiene una óptica y puede elegir las gafas que quiera, vemos que desde que vimos sus primeras imágenes con los 18 años recién cumplidos, no se ha quitado unas enormes gafas negras que prácticamente le tapan toda la cara. La siguiente página contiene la foto.
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