La relación de doña Sofía con sus cuñadas nunca ha sido fluida. Especialmente, con doña Pilar, que sentía adoración por su padre y siempre vio como una traición que su hermano mantuviera tan buena entente con Franco. Repasamos ahora los hechos que han marcado las circunstancias de esta familia protagonizando un auténtico choque de trenes y dividiéndola en dos bandos casi irreconciliables.
6Sucedió en Palma
Si hay algo que ha marcado el reinado de don Juan Carlos han sido los veranos en Palma. Durante años, doña Sofía invitó a su hermano Constantino y su numerosa prole a pasar unos días allí durante el mes de agosto. Era habitual ver a los “griegos”, como les apodó cierta parte de la prensa, ocupando un lugar privilegiado al lado de los reyes. Quizás muchas personas ya ni recuerdan que doña Pilar veraneó muchos años en la isla. Lo hizo hasta que su casa fue demolida por una ordenanza. Sus hijos se encargaron de recoger los bártulos y ella juró que no volvería por allí dado como habían discurrido los acontecimientos.
En relación al protagonismo de las infantas Pilar y Margarita en los veraneos reales no es exagerado calificarlo como escasísimo por no decir nulo. Su presencia ha pasado completamente desapercibida, no siendo incluidas en citas en las que sí estuvieron presentes los hermanos de doña Sofía. Todo esto no ha hecho más que poner kilómetros de distancia. Historias de la historia familiar de los Borbones.