Eran muchas las voces que se preguntaban dónde estaba Belén Esteban. Tras su victoria judicial a Toño Sanchís, la colaboradora había desaparecido de la faz de la televisión. Sin embargo, ha sido ella misma la que ha querido compartir con sus seguidores unas fotografías en compañía de su novio, Miguel Marcos, mientras disfrutaba de un viaje en alta mar (sic). Felices, compartiendo momentos cargados de romanticismo, Belén y Miguel posan ante las cámaras que les fotografían. Flash, flash. Y, entre toma y toma, la Esteban se refresca con un cocktail de lo más apetecible.
Tanta felicidad ha provocado un aluvión de críticas en las redes sociales. Las imágenes de la pareja saboreando lo dulce del amor acumulan más de 6.000 comentarios. Más del 80% hacen referencia al sobrepeso evidente de los protagonistas y al tallaje minúsculo del bikini de la copresentadora: “ballena a la vista”, “cómprate un bikini de tu talla”, “más fea y no naces”, “te odia todo el mundo no hay más que leer estos comentarios” son solo un ejemplo de los insidiosos comentarios de los instagramers. Pero la polémica sobre su salud viene por otra fotografía.
4La televisión, su gran cambio
La primera vez que la vimos debutar en la pequeña pantalla fue en el año 2000. La «Princesa del Pueblo» lo hizo como colaboradora del programa matinal de Antena 3 ‘Como la vida’, presentado por Alicia Senovilla. Aunque su energía y forma de expresarse son las mismas que a día de hoy, no lo era su cara. Pues Belén lucía una imagen cuidada y sana. Además, a la hora de maquillarse apostaba por tonos neutros y claros. Lo mismo hacía con la ropa que lucía en sus primeras intervenciones. Y es que nada hacía presagiar lo que ocurriría en cuestión de poco tiempo.