Isabel Pantoja ha posado muy feliz junto a su nieta en un día muy especial. El bautizo de la segunda hija de Kiko Rivera e Irene ha sido el gran día en donde la tonadillera se ha coronado por primera vez como abuela. Nunca antes había posado junto a su nieta Carlota, y ahora le hemos podido ver con una sonrisa de oreja a oreja. Un papel que desconocíamos de la tonadillera y que ahora ha mostrado con soltura y esplendidez mostrándonos sus dotes como abuela.
3Isabel Pantoja recuerda al gran amor de su vida
Isabel Pantoja se emociona al mirar a su nieta. Carlota tiene unos ojos de color azul profundo que llenan de recuerdos a la tonadillera. Cuando mira a su nieta ve al gran amor de su vida. Recordando al marinero de luces, su difunto marido, Isabel Pantoja no puede hacer otra cosa que conmoverse. Enternecida con la mirada de Carlota, la cantante la ha cogido en sus brazos, como si se tratase de un trocito del torero transformado en una preciosa y delicada niña.
«Son los ojos de Paco» decía Isabel Pantoja maravillada. La gran pasión de Isabel Pantoja siempre será Francisco Rivera, un amor que no pasa con los años. La renovada Isabel Pantoja está más feliz que nunca, y cómo no, deseosa por cambiar las diferencias que ha tenido en todo este tiempo con sus familiares. Un antes y un después muy esperado en el clan Pantoja. «Cuando Carlota me mira, me mata… Cuando profundizo en su mirada veo a su abuelo».
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