Es la pescadilla que se muerde la cola. El tócame Roque. Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana siguen sus enfrentamientos a pesar de que, tal y como expliqué en exclusiva en La Mañana de TVE, han alcanzado un acuerdo para que él devuelva todas las pertenencias de ella que todavía conserva. Pero las próximas horas pueden ser más que definitivas.
Arantxa no esconde su preocupación ante la que puede ser, sin duda alguna, la gran batalla lidiada entre el ex matrimonio. Explican a Cotilleo.es que Josep estaría dispuesto a dejar de pagar el apartamento en el que la tenista vive junto a sus hijos, cuya renta ha estado asumiendo desde que su relación se rompió en 2017. Se trata de una casa situada en una de las zonas más caras de Miami y en la que, tal y como mostró en exclusiva el programa que presentan María Casado y Jota Abril, puede disfrutar de servicios tales como piscina, gimnasio o sauna.
No es la primera vez que Santacana tiene problemas relacionados con este inmueble. En plena separación, el empresario se presentó en el apartamento e intentó acceder a él preso de los nervios, tal y como refleja un correo electrónico en el que el abogado de Arantxa exige al letrado contrario que su cliente cese su comportamiento hostil.
Decisión muy controvertida
Lo que está claro es que, de confirmarse, la decisión de Santacana podría suponer un grave perjuicio para la deportista. Sobre todo porque, en apariencia, sus ingresos económicos han menguado notablemente en los últimos tiempos, dificultando la sostenibilidad de su alto nivel de vida.
Renglón aparte merece la relación que, en estos momentos, Josep mantiene con sus hijos. Me insisten en que el catalán lleva cerca de tres semanas sin tener contacto alguno con sus vástagos y que la indignación de Sánchez Vicario es, con el paso del tiempo, más incontrolable.
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