Hace escasos días podíamos ver un conflicto entre las reinas de España en la Misa de Pascua. Una polémica que por poco no acabo llegando a las manos. La relación entre la reina Letizia y doña Sofía nunca ha sido buena. Esta vez la disputa nacía tras el intento de doña Sofía de hacerse una foto con sus nietas, Leonor y Sofía, el cual fue supuestamente boicoteado por la actual reina española.
Muchos empiezan a notar que lejos queda la calculada y metódica presencia de Letizia en actos públicos, pues esta imagen que tanto ha intentando mantener ante todo, está empezando a ser sustituida por otra faceta más humana y más visceral. Sólo hay que echar un poco la vista atrás, para poder recordar algunas de las broncas que han ido captado los medios. En estas escenas encontramos la supuesta verdadera personalidad de la reina. ¿No nos crees? ¡Pues aquí te mostramos algunos de estos famosos momentos!
2Letizia dispuesta a mantener su privacidad incluso siendo Reina
Cuando una plebeya, que ha sido tachada en numerosas ocasiones de borde y seca por sus compañeros de trabajo o conocidos, se convierte en Reina de España es normal que tenga muchos enemigos que intenten destronarla del trono. Por ello, algunos de estos peculiares amigos de la reina, no han tardado, cada vez que se les ha presentado la oportunidad, en airear toda clase de trapos sucios. Como el que os vamos a contar a continuación.
Al parecer, la reina Letizia, acompañada del monarca Felipe VI, había aprovechando una noche para ir a degustar, en pareja, los diferentes platos del conocido restaurante madrileño Carus, el cual se encontraba abierto para todo el público. Pues bien, según lo que declaró, en su momento Jaime Peñafiel, la reina percibió como un hombre, que se encontraba comiendo en el restaurante, la tomaba una fotografía a escondidas.
Este gesto no debió de sentarle nada bien a Leticia, ya que rápidamente se levantó y se dirigió hacia el señor con la finalidad de increparle lo siguiente: «¡Usted no me fotografía!», claramente enfadada. Poco le importó ser la princesa de España y que el lugar estuviera lleno, pues manifestó claramente su opinión, provocando que el hombre visiblemente avergonzado, pidiera perdón y guardará el teléfono móvil.