Rosario Flores es, sin duda alguna, una de las mejores artistas que tenemos en este país. Sus canciones siempre consiguen llegar a los primeros puestos de las listas de éxitos de este país, y proviene de una estirpe familiar que también le ha dado muchas lecciones sobre el mundo de la música.
A pesar de todo, ella ha afirmado arrepentirse, en el programa ‘Mi casa es la tuya’ con Bertín Osborne, arrepentirse de haber sido tan expuesta de niña por su madre, y lo muchísimo que sufrió con la muerte de su madre y su hermano, unos hechos que, indudablemente, le han marcado mucho.
Sin embargo, algo que le llena de nuevo de felicidad es el institnto maternal que, de nuevo, se le ha encendido. Y es que hace las delicias de todos los pequeños que se encuentran con ella en ‘La Voz Kids’, programa en el que ella es coach, y que ha provocado que quiera ‘adoptarlos’ a todos.
Y es que Rosario Flores es, a pesar de todo, una mujer afortunada. Tiene un trabajo que le llena por dentro y por fuera, y además, la proyección que está viviendo desde hace muchos años de la mano de ‘La Voz’ y ‘La Voz Kids’ hace que ella esté pletórica. Tanto es así, que incluso consigue que muchos de los niños que ven cómo se gira la cantante, empiecen a llorar de emoción, algo que descompone por dentro a la artista.
Y es que la vena maternal no puede dejarla atrás, y hace que a muchos de los niños quiera llevárselos, incluso, a su propia casa si pudiera. Rosario Flores es toda una madre para los niños que la eligen, e incluso, cuando no la eligen a ella, también se vuelva en halagos con las criaturitas.
Pero si hay algo que no soporta y no puede ver es cuando los pequeños no son escogidos y empiezan a llorar. Algo que la destroza por dentro, y que trata de evitar a toda costa, dirigiéndose hacia ellos sin dudarlo, tirándose en el suelo y haciendo lo posible para evitar que sigan con el llanto, un gesto más que demuestra que, si de ella se tratara, ‘adoptaría’ a todos los pequeños que pudiera, e incluso más, para su equipo, el de Rosario Flores, de la coach más madre de todas.
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