La infanta Cristina de Borbón cuenta los días para enfrentarse a uno de los momentos más amargos de su vida. Si sentarse en el banquillo de los acusados fue un revés personal e institucional para la Corona, mucho más lo será cuando en apenas tres semanas su marido tenga que personarse en el Tribunal Supremo para cantar una inocencia que ya nadie cree. Conspiraciones y presunciones aparte, la exduquesa de Palma debe reorganizar su vida en torno a esta oscura fecha en el calendario de su año más oscuro.
2Se tuerce la situación de los Urdangarin y Borbón
Con el recurso de apelación presentado, la cosa no ha hecho más que torcerse para el marido de la infanta. Tanto es así que, lejos de guardar alguna esperanza, la Fiscalía no hizo más que golpear donde más duele. Desde el Supremo se solicitaba el incremento de la pena para Iñaki Urdangarin. De seis años y tres meses, el cuñado del rey de España podría pasar, diez años privado de libertad.
El ministerio público emitió un escrito en el que informaban categóricamente de que «Ignacio Urdangarin deberá ser condenado como autor de un delito continuado de prevaricación en concurso medial con un delito continuado de falsedad en documento público, así como de malversación, aplicando el artículo 65.3, al no ser funcionario público y la atenuante simple de reparación del daño».