Pilar Abel, la vidente que lucha por conseguir la paternidad de Salvador Dalí, se encuentra en el momento más crítico de su vida. Con un recurso presentado (y aceptado) ante la Audiencia Provincial de Madrid tras el varapalo judicial que la desvinculaba absolutamente del artista de Figueres, ahora se topa con otro golpe: la muerte de su madre.
Antonia Martínez ha muerto a los 88 años de edad a causa de una neumonía en la residencia de ancianos donde estaba ingresada. Los restos mortales de la madre de Pilar Abel descansan en el Tanatorio de Figueres. Este medio de comunicación ha podido ponerse en contacto con la vidente y nos ha informado de que el próximo martes será cuando se celebre el funeral, el responso y la correspondiente despedida a la supuesta amante de Dalí. «Estoy en el Tanatorio. Estoy bien, sí, estoy estable«, nos confesaba Pilar, con la voz entrecortada por la consternación.
Antonia Martínez era una baza fundamental en el testimonio judicial de Abel, de hecho, en estos momentos, ha desaparecido el único nexo común que la uniría con el autor de ‘La persistencia de la memoria’. Según sostiene la catalana, su madre fue amante del pintor a principios de verano de 1955, cuando trabajaba como niñera en una casa en Cadaqués, cerca de donde vivían Salvador Dalí y su esposa, Gala. Fruto de esas relaciones sexuales esporádicas habría nacido Pilar, que sigue luchando en los tribunales por que su relación paterno-filial con el genio del surrealismo sea reconocida.
Tras la exumación del cadáver, la prueba negativa y el fallo del Juzgado de Primera Instancia número 11 de Madrid en su contra, Pilar ha declarado que «seguiré luchando porque tengo el apoyo de mi padre«, en referencia a Salvador Dalí. Haciendo uso de su derecho de apelación, el mismo Juzgado de Primera Instancia número 11 de Madrid ha admitido a trámite el recurso presentado por Abel ante la Audiencia de Madrid.
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