La primera edición de Operación Triunfo dio como resultado un grupo de concursantes preparados (¿o no?) para acariciar el éxito. Entre ellos se encontraba Álex Casademunt, un joven catalán con ansias de convertirse en toda una estrella y con cualidades de sobra para hacerlo.
Rubio, ojos azules, simpático y con una voz especial, se puso al mismo nivel que su compañero y amigo Bustamante, el tercer finalista. Después de unos cuantos dúos, peleas y unos cuantos años de desengaños, Casademunt se sincera.
3‘Fórmula Abierta’, otro fracaso
Después de comprobar que su carrera en solitario estaba más que acabada, había sufrido una estafa y había comprobado que no podía hacer nada solo, decidió unirse a algunos de sus excompañeros de Operación Triunfo. Una idea que le propusieron desde arriba y que nunca le terminó de hacer gracia pero como él mismo asumió: «era eso o nada». Crear un grupo musical parecía la solución perfecta a sus problemas financieros y personales, nacía, pues ‘Fórmula Abierta’.
Tres de sus compañeros (Javián, Geno y Mireia) se subían al mismo barco y empezaban a cosechar éxitos de forma rápida. La canción del verano y una serie de bolos por todo el país, llevaron a Casademunt a un cierto respiro. Pudo recuperar parte del dinero que le habían estafado y continuar una carrera musical.