¡Quién lo iba a decir! Pues sí, parece que en la vida de la reina Letizia no es oro todo lo que reluce y esta vez lo decimos de manera literal. Después de alzar a categoría de celebrity y de máxima ‘it girl’ a la esposa de Felipe VI, en las últimas horas han demostrado que las joyas que luce la monarca son una auténtica copia, un ‘fake’, una imitación…. ¡Qué decepción, Letizia!
3Y de las imitaciones a las joyas de verdad…
De las imitaciones de Etsy de la Reina a ‘sus’ joyas de verdad. Doña Letizia brilló como nunca en la recepción del presidente Macri y su esposa, Juliana Awada, en el Palacio Real con el motivo de la visita de Estado del mandatario argentino. La Reina ‘estrenó’ tres de las denominadas ‘joyas de pasar’, un conjunto de ocho piezas reunidas por la reina Victoria Eugenia que pertenecen a la Corona y que deben pasar de generación en generación. ¡La más importante es la corona!
La esposa de Felipe VI coronó su cabeza con la tiara de la Flor de Lis, la más importante del joyero de los Borbón y símbolo de la monarquía española que nos da una de las dos claves del misterio.
Las respuestas es clara: Doña Letizia habría sido comparada y expuesta a juicio popular ante el gran parecido físico que guarda con Awada. Los titulares de toda la prensa nacional e internacional rezaban estos días: «Doña Letizia y Juliana Awada, batalla de estilos». Y claro, ante tal disputa de imagen mediática, la Reina ha querido hacer uso y disfrute -como Reina de España que es- de la corona más Borbónica de la Casa Real y focalizar así en ella todos los flashes de la prensa. ¡Objetivo cumplido!
La diadema Bobónica, ¿cortina de humo ante el Caso Nóos?
El recibimiento del presidente Argentino con los looks idénticos de doña Letizia y Juliana Awada, la recepción del miércoles en el Palacio Real con la corona Borbónica como protagonista, la cena de gala y la inauguración ayer en Ifema de ARCO parecen ser claras estrategias de la Casa Real para ‘entretener a la prensa’ ante la sentencia y dictamen del juez ante el Caso Nóos.
Así lo dictaba ayer el juez: Iñaki Urdangarín no entrará en prisión, por lo menos por el momento, gozando así de libertad provisional para el cuñado de los Reyes. Eso sí bajo fianza de 200.000€. Además, tendrá que comparecer ante un juez los días 1 de cada mes y no podrá salir de la Unión Europea.
Era la noticia del día de ayer y ante tal escándalo y posible revuelo mediático ante el dictamen de libertad condicional para el cuñado de los Reyes, la Casa Real puso en marcha -una vez más- su mecanismo de distracción mediático y crear titulares paralelos que suavizasen el dictamen del Caso Nóos para evitar perjudicar a los monarcas.
Pero… ¿Qué poder e historia guarda la diadema de tres Flores de Lis para desviar tanto la atención de esta esperada noticia?
Diadema con Tres Flores de Lis
La reina Victoria Eugenia la llevó en su boda en 1906. Se trata de una diadema que semejaba a una corona circular antes de modificarse en 1910. La diadema de las Tres Lises es una de las piezas más representativa del joyero real y fue encargada a la casa joyera Ansorena por Alfonso XIII.
Esta excepcional diadema ha pasado de generación en generación. En la imagen que viene a continuación podemos ver cómo la han lucido la reina Victoria Eugenia, la condesa de Barcelona y la reina Sofía.
La FLor de Lis representa el emblema heráldico de la dinastía Borbón. Esta joya, que está realizada con platino y brillantes, pasó a manos de doña Sofía en 1977 y solía lucirla en grandes ocasiones. Ahora, exactamente cuarenta años después, ¡doña Letizia ‘estrena’ ‘la joya de la corona’!
Reinas de España
Así lo dispuso en su testamento la reina Victoria Eugenia, reina consorte de España, casada con Alfonso XIII. Antes de morir, dejó estipulado que deseaba que parte de sus joyas fueran adjudicadas a su hijo don Juan y que éste las transmitiera a su nieto don Juan Carlos. Y así ha sido. Como la reina deseaba, sus joyas siguen vivas.
Cuando el legado de alhajas regias cayó en manos de don Juan, fueron utilizadas por su esposa, María de las Mercedes, quién las acuñó en varias ocasiones como las joyas “de pasar”. En 1975 tras la proclamación de Juan Carlos como Rey de España, las joyas volvieron a cambiar de propietarios y empezaron a a ser utilizadas por su esposa Sofía dos años después.
Se trata de un conjunto de diademas, collares, pendientes y broches que han pasado de generación en generación y que ahora, a partir del 19 de junio de 2014, le toca lucir como reina consorte a doña Letizia y en un futuro a su hija, la infanta Leonor.
¿Qué otras tiaras, diademas y coronas guarda la Reina en ‘su joyero’?
En la Boda Real, la tiara de Victoria Luisa de Prusia
Sobria y elegante. Así es la tiara de Victoria Luisa de Prusia, una de las favoritas de doña Sofía porque se la regaló su madre al casarse y antes había pertenecido a su abuela.
La diadema que usó Letizia Ortiz en su enlace junto con el bello vestido blanco y bordado diseñado por Pertegaz.
A esta joya no se le incluye en ‘las de pasar’, ya que es una de las tres piezas atesoradas por doña Sofía, cuyo joyero es de propiedad privada y no de Patrimonio Nacional.
¡Nos encanta!
La Tiara Floral
Otra pieza muy usada por Letizia en actos oficiales, y que queda excluida de las joyas ‘de pasar’, es la tiara floral que Franco regaló a la reina Sofía en su boda.
Es una pieza convertible que puede transformarse en diadema, collar o broche. Es la misma diadema que llevó en su boda la infanta Cristina en 1997 cuando se casó con Iñaki Urdangarín.
Otra que pertenece a la reina doña Sofía y por lo tanto queda en custodia propia por ella al no tratarse de Patrimonio Nacional.
Un regalo de Felipe VI, la diadema y broche ‘Princesa’
Doña Letizia estrenó la tiara que le regaló don Felipe en su primera gran cita real como soberana. La diadema Princesa está compuesta de 450 diamantes y cinco pares de perfectas perlas australianas, elegida entre 3.000 gemas.
Esta joya pertenece al joyero privado de la Casa Real, no es del Estado ni de Patrimonio Nacional. Una de las últimas piezas exclusivas que ha llegado al joyero de doña Letizia, que Felipe regaló a su esposa por su quinto aniversario de boda.
Esta joya, de la casa Ansorena, se ha valorado en 50.000 euros. La Reina ha usado también una parte de la diadema, una flor de lis que funciona por separado como broche en alguna cena de gala.
La diadema ‘La Chata’ de la Reina
Doña Letizia luce aquí otra diadema con mucho peso histórico, conocida como diadema ‘Mellerio’ o de ‘La Chata’.
La llamada ‘La Chata’ es una diadema que simula una concha marina de la que cuelgan perlas y brillantes en forma de lágrimas.
Esta joya data de 1867, año en el que Isabel II de España la encargó a la joyería Mellerio como regalo de bodas para su hija, la Infanta Isabel, conocida como ‘La Chata’. En 1962 llegó a doña Sofía como regalo de su suegro, Alfonso XIII.
¡Todos los misterios resueltos!