Nombres tan importantes e influyentes en todo el mundo como el de Isabel II de Inglaterra y Noor de Jordania reúnen, a priori, las características de una monarca ejemplar: dedicación absoluta a su labor como reina, imagen cuidada hasta el último detalle, presencia habitual en actos benéficos…
Sin embargo, las últimas informaciones sobre ellas revelan una imagen muy distinta de las monarcas: estas dos mujeres habrían usado fórmulas al límite de la legalidad para gestionar su fortuna y ahora salen a la luz. Pero además, Isabel II y Noor de Jordania no son las únicas. Desvelamos todo lo que ocultan las llamadas reinas ‘modelo’.
3Fondos en las Islas Caimán
Según un portavoz de la monarca confirmó a ‘The Guardian’ que el ducado tiene una inversión activa en el fondo de las Islas Caimán, aunque afirmaba no conocer la inversión en la firma BrightHose. En esta misma línea, la fuente confirmó al medio británico que el ducado posee inversiones en otras dos plazas offshore. Sin embargo, también ha querido dejar claro que la monarca paga voluntariamente impuestos por los ingresos del ducado y por sus inversiones.
Un hecho que queda confirmado por las cuentas que cada año publica la familia real británica, donde ha quedo patente que la reina paga voluntariamente estos impuestos, aunque no se revela la cantidad. E Isabel II no es la única.