La de San Blas ha hecho muchísimos amigos a lo largo de su vida. El claro ejemplo de ello sería su imprescindible Mariví, con la que comparte una amistad desde que ambas eran niñas. Pero a veces las cosas no acaban bien y, cuando te encuentras con esa persona, puede pasar de todo. Pues eso es lo que le ha sucedido la pasada semana a Belén Esteban.
4La emoción era palpable
Ambas hablaron de su vida y de cómo les iba todo a las dos. «Me dijo que estaba tranquila, contenta, con sus nietos y que seguía teniendo el mismo número de teléfono de siempre. Y yo le dije lo mismo», relataba Belén sobre Rosa.
Cuando tocaron las despedidas, lo volvieron a hacer con dos besos. Y es que a Belén el encuentro le llegó al corazón. «No lloramos a lágrima viva, pero sí que nos emocionamos y se nos saltaron las lágrimas». Y es que Belén recuerda que la amistad que tenían era muy importante para ella. «Es verdad que estaba muy enfadada con ella, pero cuando la volví a ver a mí me dio alegría», reconoce Belén.