Cayetana Rivera Martínez de Irujo, tana para los más allegados, es la única hija nacida del seno de dos de las familias más mediáticas de la historia de nuestro país: los Rivera Ordóñez, importante saga de toreros de toda la vida; y los Martínez de Irujo, núcleo interno y onda expansiva de la casa de Alba, con la duquesa, cómo no, Cayetana, al frente de todos.
3El divorcio de sus padres
Tan solo unos años después de pasar por el altar, en 2002, Francisco Rivera y Eugenia Martínez de Irujo decidieron divorciarse de mutuo acuerdo, aunque con la alargada sombra de la infidelidad posándose en la figura de ambos.
La tristeza de la duquesa de Alba era más que evidente ya que la predilección y el amor por su yerno, Fran, superaba todos los límites. Para ella era un hijo más. Por no hablar de su nieta, Tana, que además de llevar su nombre y ser su madrina de bautizo, era su favorita por encima de todos los varones del clan Alba.
La vida de la pequeña Tana se dividía entre Sevilla, ciudad donde residía su padre, y Madrid, donde Eugenia tenía (y tiene) instaurado su hogar: el Palacio de Liria.