Jorge Javier Vázquez está harto. No lo decimos nosotros sino él mismo. Son muchas horas de plató de televisión a sus espaldas, muchos momentos en los que el presentador, lejos de emitir su opinión ha tenido que tragársela, pero…
¿Cuándo se debe ser objetivo o cuando lanzar un pensamiento? ¿Está permitido opinar libremente en un concurso donde el ganador resulta de los votos del público? ¿Existe la influencia del líder de opinión sobre las masas?
4Luz verde para opinar
Si pudiéramos destacar un rasgo clave de la ‘personalidad’ profesional de Mercedes Milá es que ni se casa con nadie, ni tiene pelos en la lengua. La de Esplugues decía todo lo que se le pasaba por la cabeza en el momento en el que ella quería. Hacía «lo que le salía del bolo». Tan solo había que elegir la forma y el momento de lanzarlo, acabando así, de forma magistral, con el público en el bolsillo.
En la anterior edición, Jorge Javier sufrió un freno desde la cúpula del programa cuando empezó a dar su punto de vista sobre las tramas de la casa. Hasta hoy. Si hay que invocar a Mercedes Milá de alguna forma para recuperar la audiencia y avivar la polémica, se hace. Es por eso que Jorge no ha dudado en cargar directamente contra algunos de los concursantes, por supuesto, sin estar conectado con la casa en directo.