Juan Carlos I acabó su reinado cuando su popularidad había caído en picado. La Monarquía en España no pasa por su mejor momento desde entonces. La casa de Borbón se instauró después de la dictadura y trajo consigo ciertos vientos de cambio.
Después de 40 años y varios escándalos a sus espaldas, el pueblo español está empezando a ver la verdadera cara de una institución retrógrada.
5Un yerno que es su peor pesadilla
Antes de abdicar y dejar paso a Felipe VI, el rey tuvo que hacer frente a los asuntos de su hija pequeña y yerno. Siguiendo en una de sus peores pesadillas, la buena fama de bonachón y persona que no se enteraba de nada de lo que pasaba a su alrededor cayó por los suelos. Un miembro directo de Casa Real le traicionaría.
Iñaki Urdangarín acrecentaría aún más la brecha entre monarquía y pueblo español. Un yerno que se sirve de sus influencias para conseguir ganar más y más dinero, le dio la estocada final. Juan Carlos I decidió abdicar y jubilarse para poder dejar paso a la nueva generación.
Un final de reinado que nada tenía que ver con las esperanzas iniciales con las que entró a la corona.