Ana Boyer, la menor de las hijas de Isabel Preysler, y el tenista Fernando Verdasco, su flamante prometido, han decidido ahora dar un giro radical a sus vidas. A tan sólo un paso de ser marido y mujer, la popular pareja se muda a vivir a la mansión que Miguel Boyer compró en 1988 para estar junto a su madre y del hombre con quien comparte vida con la socialité, Mario Vargas Llosa.
El por qué de esta estudiada decisión, cómo será la vida de la joven pareja junto a Preysler y Mario, los preparativos de la boda y las cifras de este (temporal) cambio de vida, a continuación.
26.000€ de gastos al mes
Uno de los principales motivos de haber dejado el preicoso dúplex de Ana Boyer se deben a los gastos de mantenimiento de la exclusiva propiedad. Unos gastos que han querido ahora compartir con otros también altos como son los de la mansión y podrían superar los 6.000 euros fijos mensuales. Por lo que el pago de los sueldos de los tres empleados contratados se lleva una parte importante de la partida.
Según ha podido saber la mencionada publicación, antaño la casa contaba con más personal y el desembolso en salarios domésticos doblaba al actual. Pero ahora, estos 6.000€ serán costeados por los cuatro a partes iguales.