Los herederos al trono de las monarquías europeas son especialistas en provocar escándalos. Una vida repleta de lujos y una misión en el mundo: Reinar o representar a su país. Puede complicarse un poco más de la cuenta, por las salidas nocturnas y alguna que otra mala compañía. La presión pública es tan grande que nunca se sabe que ocurrirá.
En las Casas Reales del viejo continente, cuanto más antigua y prestigiosa sea la institución más prisa por destruirla. Sin ser conscientes de la responsabilidad que conlleva ser los herederos, suelen realizar una serie de actos con los que toda la prensa internacional se les eche encima. En realidad son solo adolescentes o jóvenes que quieren pasárselo bien.
Algunos de estos escándalos les perseguirán de por vida, otros serán olvidados, seguirán formando parte de su historia personal.
6Mary Donaldson y su adicción
Tener todo el tiempo del mundo y estar en un entorno privilegiado puede ser más aburrido de lo que parece. Se necesita ocupar las horas muertas, esas en las que no hay nada que hacer entre acto y acto para hacer algo interesante. En lugar de leer un libro o ver la tele Mary la esposa del rey de Dinamarca prefiere otras actividades.
Los daneses dicen que cada día sale de palacio con una misión: Comprar todo lo que pueda de las tiendas exclusivas de su país. Las cantidades de dinero que la futura reina se deja en esa actividad son prohibitivas. La ropa es su principal adicción, no sabe cómo parar y parece que este hecho está destacando demasiado.
Las compras online pueden ayudarle a no ser tan visible esa capacidad de gastarse el dinero de sus súbditos en ropa de marca.
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