El juicio de Rocío Carrasco contra Antonio David Flores va camino de convertirse en uno de los juicios más mediáticos del siglo XXI. Diecisiete años de pugna, casi dos décadas de guerra mediática entre la hija de Rocío Jurado y el que fuera su primer marido.
Las informaciones relativas al proceso brotan con cuentagotas teniendo en cuenta que lo que Rocío ha presentado es una macroquerella de más de cien folios donde solicita prisión para el ex Guardia Civil por presuntos malos tratos psicológicos continuados.
4Rocío Carrasco y su peritaje psicológico
La juez ha encontrado oportuno aclarar que en el momento en el que Rocío se somete a las pruebas psicológicas periciales, tiene que contestar solamente a las preguntas de los peritos judiciales, que son quienes hacen las valoraciones.
Para llevar a cabo una querella por presunto maltrato psicológico es obligatorio presentar unas pruebas psíquicas que propone y analiza el juzgado, esto es, un peritaje psicológico al que Rocío se ha sometido y al que la defensa de Antonio David Flores ha intentado tener acceso, sin éxito.
Este peritaje se ejecuta para valorar si la persona en cuestión tiene sintomatología clínica relevante y si, en ese caso, se puede atribuir a una secuela de maltrato.