Felipe VI cumple tres años como Rey de España. Su llegada al trono era muy deseada por aquellas personas que sienten profunda devoción y respeto por el concepto real, y nunca mejor dicho, de Monarquía. La figura de don Juan Carlos fue clave y fundamental en los años más convulsos de la Historia de España. Innegable es la estupenda labor y el movimiento frío que ejecutó en el golpe de estado de 1981, sin embargo, en sus últimos años, la popularidad del monarca fue cayendo en picado.
Y sobraban motivos. La «invitación» a su hija Cristina para que se fuese a vivir a Washington con su marido, Iñaki Urdangarín, y sus cuatro hijos dejando atrás el palacete de Pedralbes ya olía mal, sus supuestas y constantes infidelidades a la reina Sofía y su viaje furtivo a Bostuana (donde se cayó y se fracturó la cadera) para cazar elefantes junto a su entrañable amiga, Corinna, hicieron que definitivamente el rey diese un paso atrás y abdicase la corona en favor de su hijo, el rey Felipe VI, de quien afirman «es el monarca mejor preparado de Europa.