María José Campanario había retomado su lugar en la primera línea mediática tras las especulaciones sobre su enfermedad. Pero la odontóloga ahora acapara dimes y diretes por el estallido de La Princesa del pueblo este martes contra su marido. Pero el torero no ha sido el único afectado por el terremoto, ya que su mujer, gracias a las preguntas de Carlota Corredera y la falta de desmentidos de Belén, también está señalada implícitamente por estas acusaciones.
El tema comenzó hace unos días, cuando Belén disparó entre líneas: «Ha pasado algo muy feo, tan feo, tan feo… No lo voy a decir por la niña. Primero me dijiste que sí, luego que no. Pero aquí está su madre. Estoy muy dolida. A mi hija no le va a faltar nada, y menos para lo que es. Aunque yo no tuviera, lo pediría… Pero lo tengo (…) Haré una gran fiesta a mi hija cuando cumpla los 18. Llamaré al padre y a la abuela. Me imagino que no van a venir (…) tengo dignidad y orgullo, lo que debo hacer es por el bien de mi hija».
Y ayer la tertuliana remató el guiso desvelando que Jesulín no quiere pagar la carrera de su hija: «A su mujer le ha pagado la carrera de odontología, a su hermano la de piloto y yo lo entiendo. Pero que no pagues la carrera de tu hija, ¡pues lo hará su madre! Después de haberme dicho que iba a pagar los estudios de mi niña ahora me ha dicho que no. Y yo de mi hija no voy a hablar, pero llevo quince días con el run run. Me dolió haberle mandando la documentación, y que no se preocupe: la niña va a ir igual. Él ha estado para todos, lo entiendo porque es su familia. Es como cuando mi familia ha necesitado mi ayuda».
Carlota Corredera le preguntó a Belén si el cambio de postura de su ex estaba motivado por «alguien», eufemismo que señala sin duda a María José Campanario. Y Belén, que nunca habla de su hija, volvió a hablar: «Miguel me dijo, ‘haz las cosas bien’ y yo le envío cuatro fotografías y la documentación por correo certificado, y eso que yo y él no tenemos nada de contacto. Y como no respondió lo llamo. Jesús me dice que ha recibido la documentación y me dice que ha llamado a su abogado y le ha dicho que es una cosa voluntaria y que no está dispuesto a pagar. Yo lo cuelgo y hasta ahora».
Y añadió: «Tranquilo, que aquí está su madre. Él (Jesulín) tiene derecho a no pagarlo para quitarla de todo esto. Y no es que en España no haya buenos estudios. Pero a mi hija no le gusta «esto» y yo decidí, tras hablar con ella, que se marchase fuera. Yo tengo una teoría por lo que ha pasado, pero prefiero no decirlo. En Ambiciones yo he vivido y él ha ayudado a su familia, lo que veo lógico y normal. Pero hombre, mi hija se va a ir a estudiar fuera. No ha debido recibir apoyo en casa, pero yo el culpable es Jesús. Yo no puedo hacer a nadie más culpable».
Este tema podría desencadenar la vuelta de la guerra entre la tertuliana y el torero, que hace años que parecía finiquitada. ¿Veremos más capítulos sobre el tema? Seguro que sí, y quizás tenga algo que decir.