Se le avecinan nubarrones negros a Paz Padilla. Y eso que hace unos meses la gaditana había logrado una gran paz profesional al consagrarse en Sálvame tras los dos años sabáticos de Jorge Javier Vázquez, labor que combinaba con su papel en La que se avecina y la presentación de las galas navideñas de José Luis Moreno.
Pero en los últimos meses la presentadora no ha dejado de pisar charcos, principalmente por las broncas con sus compañeros. En especial con Kiko Matamoros, con el que estuvo meses sin dirigirse la palabra, y con Mila Ximénez, que llegó a abandonar el plató por una sonora bronca sobre el acento andaluz. Este hecho sumado a una filtración de Laura Fa, que señaló su soledad en las pausas publicitarias, y a un artículo de Jesús Mariñas, al que supuestamente reveló su infierno laboral, terminaron con Paz pidiendo tiempo ante el relevo de Jorge Javier Vázquez.
Una vez dejada la primera fila mediática, tras el regreso del presentador titular, Paz sigue sin descansar. Y es que algunas voces dentro de la cadena piden su inmediata destitución al frente de Sálvame. Lo malo es que los números de audiencia avalan esta tesis, tal y como señala un informe de la consultora Dos 30′: Jorge Javier Vázquez cerró febrero con una media del 17% de share al frente de Sálvame Limón y Sálvame Naranja mientras que Paz y Carlota tan solo anotaron un 16,5% de share. Estos datos tienen otra lectura: Kiko Hernández no es imprescindible.
A Carlota la misma consultora también le sacó hace unos días los colores: la gallega ha empeorado los números que conseguía Marta Torné en Cámbiame. Pero volvamos a la comparativa: el presentador cosecha un 15,7% de share en target comercial por el 14,8% de las presentadoras, que también salen derrotadas en las comparativas por edad: entre 13 y 24 años Jorge Javier ha mejorado los números en casi punto y medio y entre los 25 y 44 años las cifras han subido ocho décimas. Pero lo peor para Paz Padilla es que de la comparativa entre los tres presentadores de Sálvame sale derrotada: ella es la que en estos dos meses ha conseguido menos audiencia, hecho que podría repercutir contra su trabajo dado el movimiento histérico que se está produciendo internamente en Mediaset por la crisis de audiencia que sufre Telecinco.
Hace tres meses Paz Padilla señalaba en Diez Minutos que creía que no había tocado la cima profesional, pero se mostraba con los pies en la tierra ante un eventual cambio laboral: «Creo que no he llegado a la cima. Yo he tenido épocas muy buenas, pero nunca he sido consciente de que estaba teniendo una buena época, porque como siempre pienso que esto se puede acabar… Lo que quiero es aprovechar el momento, aprender, disfrutar y ser consciente de que mañana a lo mejor no estoy aquí (…) Sé que soy feliz y que lo tengo todo. Ahora mismo tengo una vida estable y tranquila a nivel emocional, con mi niña… Pero la gente no me va diciendo por ahí: ‘¡Eres Top Ten!’.