Mediaset ya mira de reojo la llegada de la primavera y el regreso de Supervivientes. El reality-show podría ser el mejor antídoto para Telecinco, que acumula dos meses consecutivos de derrota con dos evidentes culpables: Gran Hermano y Gran Hermano VIP. Antena 3 les ha remontado gracias a que ambos concursos no rompen los audímetros como antaño.
El mítico reality-show con anónimos promedió el peor resultado de sus dieciséis años de historia con 2,2 millones de espectadores y un 19,6% de share, caída de tres puntos y medio en el estreno de Jorge Javier Vázquez respecto a la despedida, ¿temporal?, de Mercedes Milá. La edición VIP, encabezada por Toño Sanchís o Aída Nizar, no ha mejorado los resultados de su antecesor y está apuntando una caída interanual de alrededor de cinco puntos, cifras que han obligado a los responsables del concurso a introducir nuevos elementos en forma de concursante para dinamizar el día a día de la casa más famosa de Guadalix de la Sierra.
Vistas las audiencias, Supervivientes parece un valor seguro tras los tres millones de espectadores y el brutal 26,4% que marcó el año pasado con Mila Ximénez encabezando el reparto. ¿Qué nombres suenan para este año? El que lo hace con más fuerza es el de Chelo García Cortés, que hace unos días señaló a pregunta de Jorge Javier Vázquez: «¡Hombre! Llevo dos años esperando, ya me toca…». La colaboradora «más silente» de Sálvame podría encontrar su sitio gracias a su presencia en un concurso en el que estuvo a punto de participar en su edición de 2014.
Pero la gran revolución del año podría ser Belén Esteban, que ya ha comentado que no está pasando por unos buenos momentos económicos y que quiere dejar la televisión cuanto antes. ¿Será el dineral que podría que cobrar en Supervivientes la clave de la resolución de sus dos problemas? Eso parece. La Princesa del pueblo señaló la semana pasada qué le inquieta para firmar por el reality aventurero más emblemático de Telecinco: «Si pudiera tratar mi enfermedad allí igual sí, pero imagínate que me da una bajada de azúcar y no llega el helicóptero… ¡Podría morir! ¡Es que llego muerta!».
Telecinco es consciente de una evidencia: la tercera edición de Gran Hermano VIP, gracias a la presencia de Belén Esteban, fue el reality-show más visto de la cadena en la última década con unos resultados astronómicos nunca vistos desde la llegada de los nuevos canales: 3,9 millones de espectadores de media y un salvaje 29,8% de share. María Lapiedra, Luis Rollán, Jordi Martí, Mari Ángeles Delgado (madre de Aída Nizar), Mónica Hoyos o Makoke también suenan con fuerza en las últimas horas. María podría aportar su eterna exuberancia y su desenfreno sexual. El periodista Luis Rollán, acusado de traicionar a amigos famosos, añadiría morbo. Jordi Martí ya demostró su volcanica forma de ser en la Sálvame Snow Week. La madre de Aída Nizar, de tal palo, garantiza guerras. Mónica Hoyos por su parte intentaría seguir exprimiendo su guerra con Carlos Lozano. Y Makoke sería la clásica cuota del clan Matamoros, que nunca falla.