La situación emocional, y la presión mediática, por la que debe estar pasando el hijo de Ivonne Reyes y del, reconocido judicialmente, Pepe Navarro, debe ser de lo más dura. De esas por las que ningún niño debería atravesar y, por el contrario, vivir siempre en un clima de seguridad.
Y es que la sensación que da esta historia, más allá del posible interés de los adultos implicados en mover los hilos para conseguir victorias personales y demostrar quién tiene la razón, es que utilizan al único retoño de Ivonne como moneda de cambio y presión.
No hubiera sido mucho más lógico que Pepe Navarro se hubiera sometido a las pruebas de paternidad y certificar, si lo tenía tan claro, que Alejandro no es hijo suyo, en vez de permitir que esta situación se dilate en el tiempo.
Ivonne, en privado, siempre ha confesado que está muy segura de que Pepe Navarro es el padre de Alejandro. Mientras que el que fuera íntimo amigo de La Veneno afirmaba por su parte que la Justicia no iba a dar la razón a la venezolana en un tema del que había pruebas suficientes que demostraban que Luís Alejandro no es suyo.
Pero no fue así y Pepe ha comulgado con una sentencia que, ahora, por otras vías se intenta diluir. ¿Y qué pasa con Alejandro? ¿Cómo se sentirá el hijo de Ivonne Reyes al saber que ese padre, reconocido y señalado en numerosas ocasiones por Reyes, vuelve a ser cuestionado?
Lo suficientemente mal como para que la hermana de Ivonne, que se encarga de Alejandro mientras Reyes participa en Gran Hermano Vip considere que es mejor que el niño no asista a clase y evitarle la presión mediática.
No es justo para ninguna de las partes. Alejandro está viviendo un infierno pero, como reza la nueva demanda interpuesta por Andrea Navarro Zaldivar, ella también sufre lo suyo. Tanto como para recurrir a ciertas estratagemas con las que conseguir reabrir judicialmente la causa apoyándose en un tenedor con ADN que enarboló como prueba definitiva el detective contratado.
Cotilleo.es ha intentado hablar con el abogado de Ivonne Reyes, pero ha sido imposible porque éste, cansado quizás de tanta llamada y persecución, se ha marchado por unos días de Madrid a trabajar para otros clientes. Pero nos consta que ha dejado bien claro que la citada maniobra, y que algunos afirman que supuestamente ha tejido el propio Navarro, podría ser de todo, menos legal. Con el tenedor se podrían haber vulnerado los derechos del hijo de Ivonne y de Pepe.
Es muy complicado que la cosa salga adelante. Ya que el hecho de que sea la hija de Pepe y Eva la que ha pedido que se reabra el caso, al no poder hacerlo el mismo Navarro, es una vía judicial no explorada anteriormente en España.
Aunque eso no quita que supone una buena base jurídica y una argumentación que podría dar la campanada. Apelar al derecho que tiene todo el mundo a saber quién son los miembros de su familia podría ser la maniobra perfecta que tanto espera Navarro.
Por ello precisamente, y por imaginarse cómo está viviendo Alejandro esta situación, a Ivonne le ha cambiado la cara desde que se lo comunicaron dentro de la casa de Guadalix. Está hundida ¿Cuál será su próximo movimiento? ¿Abandonará la casa?