Son ya varias las semanas que llevamos hablando de Paz Padilla y sus conflictos con el programa Sálvame, que no son otros que sus propios compañeros. Tal y como contábamos hace unos días, la presentadora es una mujer de escenarios que cuando las luces se encienden actúa y cuando se apagan, desconecta. Por eso no es capaz de mimetizar y empatizar con unos contertulios que se dejan la piel y la voz en plató y se llevan los conflictos a casa. Este último conflicto se remonta a la supuesta conversación que Paz Padilla ha mantenido con Jesús Mariñas. En un artículo en el medio habitual en el que colabora el veterano periodista, escribía en boca de Padilla que «no entiendo lo que está pasando ni esta persecución, y menos ahora que lo dejo. No conozco al director ni a nadie que trabaje allí. A lo mejor hice algo mal sin enterarme. Sólo así me lo explico», relata la gaditana en referencia a la noticia publicada en una revista de tirada nacional que hablaba de la mala relación que mantenía con sus compañeros.
Y continua diciendo, «no sé qué pasa. De entrada, no es que me lleve mal o no me entienda con el equipo. Sólo son mis compañeros de trabajo. Ni salimos juntos ni vamos a cenar. Siempre he mantenido ese distanciamiento, el mismo con el que hace 20 años decidí no conceder entrevistas». En la columna referida, Mariñas hace alusión a una vuelta precipitada de Jorge Javier Vázquez a Sálvame teniendo en cuenta la insostenible situación en la que se encuentra Paz actualmente en el programa líder de las tardes de Telecinco. «Jorge Javier adelanta su retorno después de dos años haciendo teatro. La cadena de Fuencarral precipita así una vuelta que habían previsto para la primera decena de febrero, pero prefieren el borrón y cuenta nueva, quizá alentados por las declaraciones del más «showman» que presentador, que anuncia que «deseo retomar “Sálvame” para enderezarlo porque hace agua»».
Sin embargo, la presentadora sustituta quiso tomarse un tiempo ayer en el programa para explicar su postura que es absolutamente contraria a lo que describe Mariñas. No solo niega la mayor sino que invita a Jesús a sacar la supuesta grabación de la conversación: «primero que yo no sabía que Mariñas me estaba grabando o que esto se iba a publicar pero yo te reto, Jesús, saca la grabación. Tienes mi autorización». Lydia Lozano saltó -casi- de su silla aludiendo a que «Mariñas no graba a nadie. Él trabaja con una libreta, al estilo Trialasos, eran los únicos que iban con libreta. Ni siquiera grabadora. ¿Tú has visto el móvil de Mariñas? ¡Es de esos antiguos!». ¿Estamos dando por hecho que un periodista se inventa un conversación completa y además la publica o que Paz Padilla ha hablado más de la cuenta con quien no debía y ahora se arrepiente? «De verdad os lo pido, no hagáis que yo pierda la confianza en los compañeros ni en la prensa, no podemos vivir así», explicaba, decepcionada, la humorista que además añadió que es feliz en Sálvame y que allí seguirán «papá (Jorge), mamá (ella) y por supuesto, Carlota«. Dejando claro que, por supuesto, Sálvame es el único programa donde la sustituta tiene sustituta.