Belén Esteban es a la televisión lo que el opio al pueblo. De ella nos gusta todo. Arrebata la manera en que pone a Dios por testigo de que las pagarán muy caras quienes se metan con su hija. Apareció en los medios y puso una pica en Flandes. ¿Quién da mas? Solo ella es capaz de sobrevivir a su propio personaje y reinventarse en la novia de Miguel, la madre de Andrea, la hija de Francisco y Carmen, la copresentadora de Sálvame, el Ave Fénix que resurge de sus cenizas… Rubia, muy rubia, de largos cabellos, cual valquiria en flor que engancha y atrapa. Su sombra es alargada y acaba por cogerte. Excesiva y lenguaraz, a pesar de todo, Belén es de las pocas personas a las que amarás después de haber odiado. ¿Cómo es posible? Te lo contamos.
Es posible que Belén Esteban te resulte excesiva en sus formas y maneras. Sin embargo, eso es lo que la hace diferente, lo que atrae y engancha. La rubia es un panal de rica miel al que la gente se asoma y, cuando menos se lo esperan, atrapados quedan en él. Ay, Belén, eres la miel, ese dulce veneno que mata de felicidad. Sino existieras, te inventaríamos. Y sí, lo confesamos, sentimos adoración cuando la vemos ponerse en jarras, con las manos apoyadas en las caderas y diciendo: “¡Eh, qué me enfado!”. Nos parece muy tierna la imagen porque muestra a la niña desvalida atrapada en un cuerpo de mujer buscando protección. Es posible que no lo parezca, pero es muy sensible. Los berrinches que se pilla en plató se los lleva a su casa. Menos mal que allí la esperan sus dos rocas, Andrea y Miguel.
Para muchos, Belén ha sido demasiado vehemente con Jesulín. ¿Sabías que en el fondo del asunto solo existe el deseo de que el torero ejerza de padre con Andrea? Y es que desde que nació, el de Ubrique ha frecuentado muy poco a su hija mayor. Desde su entorno han alegado mil y una versiones. Diferentes perros con el mismo collar que ladran a la Esteban señalándola como la culpable del distanciamiento. Y no, no es así. El diestro siempre ha expresado que le explicará a Andrea el porqué de su distanciamiento cuando cumpla mayoría de edad. Y, mientras tanto, menos mal que ahí está su madre para criarla, mimarla y protegerla. Así no, Jesús Janeiro Bazán.
El paso de Belén Esteban por GHVIP bien podría señalarse como fuegos artificiales. La rubia dio vídeos hasta la extenuación. Se enfrentó a Olvido, a las chirlas y al sursum corda. Y qué decir del culebrón en que convirtió una insignificante maleta que Miguel debía comprarle a Andrea. Te pongas como te pongas, ella fue lo mejor del reality. Por ella nos enganchamos y nos tragamos cada entrega. Caímos presos en una adicción de la que nos costó recuperarnos cuando terminó. Se embolsó el premio y tuvo el detalle de compartirlo con quienes lo necesitaban. ¿No es adorable? Y es que a generosa no le gana nadie.
Hay quien afirma que Belén está en horas bajas, que ya no tiene el apoyo del público. Sin embargo, esto no es así. Son muchos los seguidores que la jalean en redes sociales y foros. Para bien o para mal, estamos ante una mujer que no deja indiferente. O la quieres, o la detestas. En este último grupo se posiciona quien antaño fuera su mano derecha, Toño Sanchís, que se ha buscado un lugar bajo el sol en El programa de Ana Rosa y desde allí lanza sus dardos envenenados. Toño es feliz. Ha cumplido su sueño de convertirse en Belén Esteban y hasta sigue sus pasos profesionales. “Si ella fue a GHVIP, yo también”, comenta Sanchís henchido cual pavo real. Miedito da ver a un representante aireando secretos íntimos de sus ex representados. Nosotros no nos fiamos. ¿Y vosotros?
Muchos se preguntan qué hace Belén Esteban en el Deluxe. Pues bien, para nosotros es imprescindible. Su forma de meter baza en las entrevistas nos encanta. Aporta ese punto de vista del personaje tan necesario en la conversación con el invitado. ¿Y qué decir cuando la entrevistada es ella? Pues que nos atrapa. El énfasis que pone a la hora de explicar sus vivencias hace que nos quedemos pegados desde la primera hasta la última palabra. Y es que en ella todas las historias son aprovechables. Da igual si habla de sus días junto a Jesulín, de Miguel, de Fran, de su paso por GHVIP… Nos atrapa en todas sus formas y maneras. Con sus aciertos y errores. ¡Belén, eres lo más!
Ni podemos ni queremos negar que hemos sido muy críticos con la Esteban y que ella nos la ha devuelto en plan heavy. Pues bien, a pesar de, la vemos con otros ojos desde que la hemos redescubierto. Esa fidelidad a sus principios la hace inmensamente atractiva. Ahora la contemplamos desde otra perspectiva y en toda su inmensidad. Como cuando ha sido objeto de reportajes que se han realizado gracias al chivatazo. Y es que ya son varios los paparazzi que aseguran que Toño les filtró el destino de su entonces representada para que la cazaran. ¿Acaso este hombre no tenía suficiente con el porcentaje que trincaba por su trabajo de representante? De piedra nos quedamos ante tamaña revelación. Pobre Belén, que tenía al enemigo en casa y no lo sabía.
Novia a la fuga
Lo que ocurrió con el traje de novia de Belén Esteban nos parece una canallada. Que firmas de prestigio se negaran a vestirla alegando que perderían ventas es, como poco, un libelo. Y más si tenemos en cuenta la de seguidoras que tiene. Tan solo hay que ver lo bien que se ha vendido su merchandising. Su tirón es innegable. Y, al final, todo salió bien. Ella estaba preciosa el día de su boda con Fran. Brillaba con luz propia con el precioso vestido que le hicieron. Más publicidad, imposible. Se comenta que hubo más de un tirón de pelo para los responsables de comunicación de las firmas que rechazaron vestir a la rubia por la publicidad que dejaron escapar. Un pastel de muchos ceros que fue ampliamente difundido en los medios.
No cabe duda de que la Esteban se ha consolidado como estrella televisiva tras fichar por Sálvame. A su faceta de personaje, ha unido la de colaboradora con opinión propia. Un terreno donde se mueve como pez en el agua y que en El programa de Ana Rosa le estaba vedado. Las mañanas de Telecinco se le quedaron pequeñas y voló para resucitar en las tardes de la cadena. Belén es una pieza imprescindible en el puzzle de Sálvame. Un universo donde ha alcanzado una nueva dimensión con savoir faire diferente. En esto de los medios, no vale el menos es más que Ana Rosa Quintana ponía en práctica con ella.
Ha encontrado el amor verdadero
Tras varios años convulsos, Belén ha encontrado la paz junto a Miguel. Se conocieron cuando él fue a su domicilio en calidad de conductor de ambulancia para atender una urgencia. La atracción dio paso a la convivencia. Miguel se ha convertido en la roca de la rubia, su puerto seguro. Es él quien la calma, consuela y aconseja cuando van mal dadas. Fue Miguel quien consiguió que se arreglaran las cosas entre Belén y su hermano cuando Toño malmetió. Buscaba el representante un enfrentamiento que no consiguió gracias al buen hacer del conductor de ambulancia. Y es que, como siempre, ha triunfado el amor. Somos muy fans de esta pareja. ¡Ea, que lo sepa España entera!
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