La Miss de un país, es decir, la chica más bella del año elegida rigurosamente por un jurado experto, no solo debe ser una chica esculpida, esbelta y de facciones perfectas. La representante de una nación concreta debe ser conocedora de la cultura de su tierra (y en algunos casos de otras, recordemos a aquella chica a la que le preguntaron por Rusia), y debe tener además la rapidez mental para responder sin titubear a ciertos tipo de preguntas, que en ocasiones llegan a ser controvertidas.
Recientemente se ha celebrado el certamen de Miss Chile 2016 donde chicas de todas las provincias se presentaban con la ilusión de alcanzar el sueño de ser la más bella de su país. En la ronda de preguntas del jurado, Catalina Cáceres, una de las candidatas favoritas, fue llamada al estrado. «¿Tú estás de acuerdo con el matrimonio igualitario?», le preguntaron sin paños calientes.
https://www.youtube.com/watch?v=_IlOGoy3iaU
“Creo que esa pregunta es un poco capciosa. Sé que de una reina de belleza se espera una respuesta políticamente correcta, pero también siento que tenemos que tener opinión. Estoy absolutamente a favor del matrimonio igualitario, no puede ser que en Chile existan ciudadanos de segunda categoría que no tengan los mismos derechos que tenemos todos”, respondió sin vacilar la joven de 26 años.
Catalina Cáceres, a favor del matrimonio igualitario, la adopción entre parejas homosexuales y la diversidad de las familias, se alzó como Miss Chile 2016, en un país del que según dicen, es el más conservador de toda Latinoamérica. ¡Bravo por ella!