Raquel Bollo lleva unas semanas de auténtica locura. A la demanda que le ha interpuesto Chiquetete y por la que le pide pena de prisión y una indemnización superior a los 700.000 euros se une ahora el enfrentamiento visceral que ha mantenido, en las últimas horas, con Las Mellis. Las que fueran amigas suyas íntimas y de Isabel Pantoja han asegurado que Raquel ha hablado mal de sus propios compañeros de tertulia y que, al contrario de lo imaginado, lo que piensa la tonadillera de ella no es demasiado positivo.
Raquel no está de acuerdo con aquellos compañeros de tertulia que le acusan de haberse vendido, de nuevo, a Isabel Pantoja
Además, Raquel está en el centro de la diana desde que Kiko Hernández reabriera la guerra que mantiene con Kiko Rivera. Como amiga personal del ahora DJ, su papel es realmente complicado. Nada entre dos mares, lo que genera desconfianza entre el resto del equipo que, consideran, ahora que ha vuelto a encontrarse con Isabel Pantoja (aunque el suyo fue más bien un desencuentro) se ha cegado de nuevo: «Cada uno puede creer lo que quiera. Me duele que el haber ido a la boda y haber tenido un acercamiento con Isabel es como si hubiera cambiado. Y no es verdad. Yo sigo siendo la misma».
También ha tenido un enfrentamiento destacado con Tamara García, la que fuera novia de Kiko que ha acudido al programa de las tardes de Telecinco para dar su opinión sobre la boda. La misma ha dicho que las imágenes de la exclusiva son «muy frías», insinuando que, tal vez, entre Kiko e Irene no haya tanto amor como parezca. Y la Bollo también ha tenido que salir en su defensa: «Kiko Rivera no hace muchas cosas, pero a mí me duele que cada vez que os metáis con él, yo lo paso mal porque es una persona a la que quiero. Yo no hago defensa de Isabel porque a ella no se le ha atacado, todavía no hemos hablado y tengo mi conciencia realmente tranquila».
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